sábado, 15 de octubre de 2011

Sobre las razones del corazón que la razón ... ni idea

Hablemos de Amor, hablemos de todos los tipos de amor, hablemos de las incansables estrategias, las ogotadoras travesías, los valientes aprendizajes y las lecciones más duras desde el amor, por el amor y para el amor. Hablemos del propio y del ajeno, del fraterno, del familiero, de esos de amig@s como pocos y de el flamante apasionarse con amor, del amor por el legítimo otro o del amor de almas gemelas en los roles que sea, hablemos otra vez de amor que será por algo inspira textos, libros, canciones, poemas y cuentos.


Ahora hablemos del daño en nombre del amor, hablemos de a qué estamos llamando amor y para qué. Hablemos de tod@s las historias torcidas y retorcidas, en todos los idiomas, en todas las épocas, en nombre del amor. Hablemos de ese supuesto opuesto, el odio... ¿quién dijo que el opuesto del amor es el odio? que pasaría si pudieramos tener tal conciencia de nosotros mismos, y de quién estamos siendo, que pudieramos llamar a nuestro "odio" las siglas de aquello que percibimos como, "ostentacion de ideas opuestas" ese desenfreno por destruir el opuesto, no sea cosa que me vea obligado a evaluar mi posición, o peor aún a reconocer un error ¿eso es el opuesto del amor? o eso es lo que aparenta ser?. Si hablamos de amor propio, es fácil distinguir las carácterísticas visibles, incluso en una persona con la que sostengo una breve conversación puedo detectarlo con solo prestar atención. El grado de autoestima de una persona es perceptible en su manera de mirar, en su postura, en la rectitud de su espalda, en su tono de vos, en las palabras que elije, en su interacción con lo que lo rodea y con los que lo rodean, por lo tanto creo que el grado de amor propio de una persona es perseptible por cualquiera dispuesto a prestar atención, y sino miremos a los niños y su manera de relacionarse en el colegio. El niño que molesta constantemente a otro, lo elige porque lo juzga mas debil en algun aspecto y aunque no este haciendo esta elección a plena conciencia, puede percibir claramente los niveles de confianza y seguridad de su sometido. Ahora volvamos al mundo adulto ¿realmente creés que no se nota? el amor es como la luz, siempre se ve...

Siempre hay tiempo para seguir buscando amar de verdad, en plenitud, con todas las condiciones que tu alma necesita, si estas ahí, lo sabes, sino, también. No te engañes. Ama, del otro extremo solo hay miedo, el odio es una manera mas de esconderlo. Ama, ama de verdad y estarás vivo en serio.
Toodas las fotografías de este blog pertenecen a Gregory Colbert